La herencia espiritual

¡Oh Señor! Tu mar tan inmenso y mi barca tan pequeña.
ORACIÓN DE UN NAUFRAGO

1. INTRODUCCIÓN
1.1. Desde hace un buen tiempo que notamos la existencia de algunas tendencias que tratan de modificar algo de nuestra valiosa herencia espiritual, o dislocar sus usos y costumbres tan añejas. La masonería por definición y esencia, no podemos hacerla nueva, porque representa el legado de nuestros padres que fundaron la Orden, con su tradición, doctrinas, enigmas y misterios; con las ceremonias ritualísticas repetidas tantas veces, pero felizmente, nunca negadas ni demolidas.
1.2. Por algo se la denomina: “Nuestra Augusta Institución”, por su nobleza de origen; o se la llamada también “La Antigua, Sabia y Honrada Institución”, por su origen sagrado. Los tiempos masónicos que hoy vivimos están completamente llenos de su rico pasado, por lo que, no podemos darnos el lujo de intentar modificarla y porque no tenemos ningún tipo de autoridad de orden cognoscitivo que nos respalde hacerlo.
1.3. Querer leer todas las obras masónicas existente en el mundo, es como intentar pellizcar un vidrio. Y de las pocas que he leído, en ninguna he hallado la mínima sugerencia al cambio, ni mucho menos poner en tela de juicio algún conocimiento. Solo usan su imaginación para interpretar de alguna u otra manera el saber masónico respetando y conservando el espíritu del mensaje.
1.4. Existe muchas definiciones de masonería, la virtud está en que todas ellas mantienen la esencia y naturaleza de lo que entendemos como masonería, es decir, conservan el espíritu del concepto masónico. Existe una muy simple pero de alto contenido esotérico, que dice: “La masonería es una nueva forma de vida.” La palabra clave del espíritu esotérico es: “NUEVA”, y su sentido no está dirigido hacia nuestra institución, sino más bien a la persona humana.
1.5. Ya dijimos anteriormente, la masonería de hoy no puede ser nueva, porque está llena de su pasado y ya no hay cabida para nuevas aventuras irreverentes. Los que quieren propiciar cambios, están realmente desubicados; y es nuestra obligación ubicarlos en el real contexto histórico, doctrinario y filosófico. ¡Vamos hacia ese objetivo QQ.HH.!
2. ¿QUE SOMOS EN EL CONTEXTO DE LOS TIEMPOS?
2.1. Ubiquémonos en el contexto histórico: Los masones de mi edad biológica constituimos más o menos la cuarta generación de masones a partir de 1723 año en que se da la “Constitución de Anderson”. Una mayoría dirán esto es poco, y yo les digo que:¡En masonería, todo es apariencia en cuanto al tiempo!
2.2. Esta apariencia se da en mi caso: Yo tengo 30 años de iniciado masón y quizás todos dirán ¡Es un viejo masón con mucho conocimiento! pero esto es falso, especialmente en lo referente a que tengo gran conocimiento acumulado en 30 años de masón; y voy a pasar a demostrárselos.
2.3. Resulta sorprendente determinar cuántas horas recibimos de instrucción por un año masónico. Aproximadamente 80 horas/año. Es decir, que en un año hemos recibido una instrucción equivalente a 10 días de 8 horas.
Base de cálculo:
1 año = 52 semanas.
Por fiestas y permisos = 12 semanas.
52-12 = 40 semanas/ año efectivas.
Hrs. de instrucción: LIGON= 20 hrs/año; TENIDAS= 60 hrs./año
2.4. Ahora os pregunto: ¿Cuánto conocimiento hemos adquirido en 80 horas al año, de ese inmenso mar del conocimiento masónico? Casi nada. Ante éste escaso tiempo dedicado a la instrucción masónica somos simples aves de paso.
2.5. Ante ésta carente preparación, ¿Con que autoridad cognoscitiva pretendemos modificar algo de la masonería? Tenemos que estar de acuerdo con ésta clase de HH:. descontentos, ya que ellos poseen una mentalidad muy restrictiva, carente de sabiduría y falta de prudencia, moderación y discreción.
2.6. Ahora ubiquémonos en el contexto del conocimiento humano.

3. ¿QUE SOMOS EN EL CONTEXTO DEL CONOCIMIENTO HUMANO?
3.1. En el “Manual para el Instructor Masónico” editado por la Gran Logia de Chile aparece el siguiente comentario: “El H. August Wolfstieg en el año 1925, es decir, hace 85 años hizo un inventario de obras masónicas relativas solamente a la HISTORIA DE LA MASONERIA, llegó a contar 45,000 libros.
3.2. Supongamos que en la Biblioteca de la G.L.B aquí en La Paz tengamos todas estas obras. ¿Cuántos años tardaríamos en leer todos estos libros? Si intentáramos leer un libro diario desde el primer día de nuestro nacimiento:
45,000 libros = Necesitamos 123 años de nuestra vida.
365 dias/año
3.3. Les pregunto HH. ¿Cuántos libros sobre historia se han escrito en estos últimos 85 años? ¿Cuántos libros habrán sobre filosofía, simbolismo, doctrina, etc.?

4. CONCLUSIONES PRELIMINARES
4.1. Tenemos poco lapso de vida biológica, para instruirnos plenamente.
4.2. Se ha comparado la gran cantidad de información masónica a un inmenso mar, en el que debemos aprender a nadar sin pretender atravesarlo todo, por lo que, ante ésta inmensidad del conocimiento masónico, no vemos obligados a ser selectivos. Pase lo que pase, hagan lo que hagan la masonería se mantendrá firme por siempre y seguirá siendo la misma.
4.3. ¿Por qué no ha desaparecido la masonería hace tiempo? Por que tiene una asombrosa herencia espiritual de naturaleza sagrada y todo lo que es de origen sagrado exige respeto, consideración y estima. Además, todos los que pretendemos llamarnos hombres libres y de buenas costumbres debemos de reconocer que lo sagrado es ineludiblemente inviolable, inalterable e inmodificable.
4.4. ¿Tenemos un legado espiritual? ¿En que consiste ese legado espiritual?

5. NUESTRO LEGADO ESPIRITUAL
5.1. Legado congnoscitivo. Existen 18 campos del conocimiento masónico:
. Ritualístico . Histórico . Metodológico (Prácticas)
. Ceremonial . Usos y costumbres . Jurídico normativo (Constit-Reglam-Estat)
. Moral . Doctrinario . Regulad. conducta (Land M.-Código-Cat)
. Simbólico . Exotérico . Área Administrativa
. Alegórico . Esotérico . Paramasónico (Religió- Metafísica)
. Filosófico . Principista . Cultura General
Legado de usos y costumbres. Tocaremos algunos principales.
5.2. Los usos y costumbres fueron transmitidos de “boca a oído” por este hecho es fácil deducir que sufran muchas alteraciones al transmitirlas de esta manera, tanto que hoy en día observamos que se están introduciendo costumbres totalmente ajenas a nuestra institución, y eso merece corregirlo.
5.3. La retórica masónica: La característica mas notable de los masones es su peculiar forma de expresarse y esto es debido a la nobleza y realeza señorial de su origen, es por ello que a la masonería se le denomina con toda propiedad el ARTE REAL, de aquí que, nuestro lenguaje es de exquisita belleza lingüística, y de consumada maestría comunicativa, que no solo debemos preservarla por respeto a éste maravilloso legado lingüístico, sino que sobre todo debemos practicarla para no perder ésta bella costumbre en el tiempo.
Legado práctico. LA TOLERANCIA.
5.4. La más apreciada, sublime y excelsa práctica de nuestra herencia espiritual lo constituye la tolerancia, tanto que la FM. la designa como la Suprema práctica de la Orden, y su absoluta obediencia promueve la permanencia eterna de la masonería.
5.5. Con frecuencia estamos enfrascados en nuestras propias conveniencias que nos olvidamos de poner en práctica las cualidades de la tolerancia: la amabilidad, la consideración hacia los demás y el ser conscientes de sus necesidades y propósitos. La práctica de la tolerancia nos permite mantener nuestro juicio y nuestra orientación espiritual. Y mantener nuestro juicio, significa preservar nuestra belleza interior que tuvimos desde que fuimos candidatos a la masonería.
5.6. En tolerancia, la masonería puede ser buena o mala. Sin tolerancia, la masonería solo es mala.

6. CONCLUSIONES FINALES
6.1. La masonería no nos pide que la modifiquemos, que la reinventemos o que la reformemos, solo nos pide que la descubramos, que la develemos en sus excelsos enigmas y misterios. ¿Quiere decir que la masonería no acepta ningún cambio? El único cambio valedero y aceptable por la masonería es: El cambio en uno mismo, no está el cambio en los ritos, ni en nuestros usos y costumbres.
6.2. Finalmente, el mayor deber del masón con su A:. I:. es preservar incólume la valiosa herencia espiritual que la masonería nos ha legado como producto de años de sacrificio y esfuerzo intelectual; y la mejor manera de preservar nuestra herencia, es: respetándola, dignificándola, ennobleciéndola, venerándola, honrándola, elogiándola y ensalzándola en todos sus aspectos.
6.3. Finalmente QQ.HH. ahora si podemos con toda autoridad contestar al enigma filosófico del ¿QUÉ SOMOS? ¡Somos unos simples náufragos en este inmenso mar del conocimiento masónico, y lo peor, es que nadie en el mundo nos puede salvar.
6.4. En masonería VM:. “No hay masones malos, sino masones mal instruidos”.

Atentamente.
Q:. H:. Flavio A. Alatrista Vera.
Maestro Masón.

autosud@hotmail.com

Vall:. La Paz, 30 de Julio de 2010